martes, 18 de junio de 2013

Hablemos de los diferentes tipos de té

Me preguntan mucho en la página de facebook, en twitter y en youtube cuál es el mejor té de todos y pues teniendo en cuenta que cada uno sirve para algo en especial decidí mejor reunir la mayoría de tipos de tés en una sola publicación acá en el blog y así cada uno aprenda a conocer las variedades existentes y a reconocer cuál es el que debe tomar según sus propias necesidades. Así que acá a grandes rasgos algo de lo que he averiguado sobre el tema.

Té rojo: También lo puedes encontrar con el nombre de pu-erh, las hojas para su preparación son cogidas y deshidratadas, luego las secan y fermentan por un tiempo muchísimo más largo que otros tipos de tés, después de esto las someten a un proceso de curación que normalmente dura años, según la edad del árbol de donde hayan sido cogidas las hojas.

Este té ayuda a perder peso porque aumenta el gasto calórico, aumenta el metabolismo y por lo tanto se queman calorías más rápidamente; es diurético y esto hace que se estimule el riñón eliminanando el exceso de líquidos; colabora con la digestión; reduce los niveles de colesterol malo en la sangre; ayuda a eliminar toxinas y residuos del cuerpo; ayuda a la renovación celular ya que es un excelente antioxidante; facilita la digestión de las comidas que tienen un alto contenido graso; estimula la actividad vesicular.

Por otro lado, este té está contraindicado para mujeres embarazadas, niños pequeños ya que por ser un energizante aumenta el metabolismo basal. También está contraindicado en personas que sufran de hipertensión pues tiene teína, la cual estimula el sistema nervioso central y aumenta la presión sanguinea.

Adicionalmente, mezclado con jugo de pomelo puede aumentar sus efectos adversos, la leche puede inutilizar sus efectos antioxidantes y puede afectar la absorción, por parte del cuerpo, del hierro que contienen algunos alimentos.

Para que sea más efectivo, se deben tomar mínimo 3 o 4 tazas al día.

Té azul: También conocido como té oolong que es, junto con el té rojo, el más difundido en China y es de los más caros. Tiene un aroma frutal o floral muy agradable y no se debe mezclar (con leche, limón, etc).

Este té es muy bueno para quemar grasas y perder peso, y muchas personas aseguran que es el tipo de té que logra de mejor manera aumentar el metabolismo hepático; combate el colesterol; tiene una gran capacidad atioxidante; previene el cancer; aumenta las defensas; preserva el sistema cardiovascular; combate el envejecimiento; mantiene la piel tersa y se ha demostrado que tiene un efecto curativo para pacientes con dermatitis; refuerza el sistema inmunológico; reduce la tenón arterial; protege de las infecciones; previene enfermedades coronarias.

Al tomarlo se pueden presentar algunos efectos secundarios como hipopotasemia que son concentraciones muy bajas de potasio en la sangre debido a la cafeína que posee; como estimula la producción de ácido en el estómago, para las personas con úlcera de estómago o ardor puede generar dolores; puede producir esofagitis; interfiere en la absorción de la vitamina B1 (tiamina); si se toma en exceso puede generar daño renal; algunas personas pueden presentar alergias a sus componentes; y finalmente, aunque no está comprobado científicamente, se cree que el té azul no lo deben tomar las mujeres embarazadas pues podría generar daños en el feto, bajo peso al nacer el bebé o abortos.

Té blanco: Este es un té sin fermentar, son los brotes de la hoja antes de abrir y deshidratados al sol o en horno. Tiene un sabor muy suave y menos cantidad de teina.

Es mucho más eficaz que el té verde pues tiene tres veces más de polifenoles que es un antioxidante poderoso que ayuda a aumentar las defensas del cuerpo y ayuda en la lucha contra los radicales libres los cuales oxidan las células, por lo tanto combate el envejecimiento celular y ayuda a prevenir el cáncer; protege contra las caries pues contiene flúor; como contiene la mitad de cafeína que el té verde, es más recomendado para personas nerviosas; aumenta la capacidad de concentración y memoria; combate la fatiga física y mental; no tiene calorías, aumenta la energía del cuerpo, es diurético y favorece la eliminación de grasas; baja los niveles de colesterol malo y triglicéridos.

Algunas personas pueden generar alergias específicas al beberlo.

Té verde: El té verde es la hoja del árbol deshidratada y secada. Según el tipo de té verde, en su proceso puede generarse un enrollado o chafado (procedimientos de creación de este tipo de bebidas). No es una bebida fermentada. Contiene más teina que el té blanco pero mucho menos que las demás variedades de té.

Es uno de los más poderosos antioxidantes; es un perfecto aliado para luchar contra el envejecimiento; evita el endurecimiento de las paredes arteriales; colabora con la circulación; se dice que puede ser anticancerígeno y bueno para la próstata; reduce la acumulación de grasa en el hígado y ayuda en el proceso de perder peso; tiene capacidades estimulantes; ayuda a la concentración y el trabajo mental; previene las caries y es bueno para dientes y encías.

No deben tomarlo las personas con hipertensión, mujeres embarazadas o niños por su contenido de cafeína; dificulta la absorción del hierro de los alimentos así que no se debe tomar muy cerca a la hora de las comidas; no debe tomarse en exceso.

Té negro: Después de recoger las hojas, se deshidratan y se fermentan durante horas antes de secarlas. En China es conocido como té rojo.

Es antioxidante y por lo tanto protege al organismo contra los radicales libres; previene el envejecimiento y ayuda contra los problemas degenerativos del sistema cardiovascular; es astringente e ideal para combatir la diarrea o la gastritis; colabora con la eliminación de líquidos del organismo (diurético); bajo en calorías y aporta sensación de saciedad; es estimulante para mente y cuerpo.

Genera insomnio; reduce los niveles de sodio y potasio en sangre; aumenta la secreción de ácidos en el estómago; puede generar la presencia de constipación; aumento del ritmo cardíaco y tensión arterial; genera cefaleas; Embarazo, la cafeína traspasa la placenta y si se toma en exceso puede producir un retraso en el crecimiento intrauterino; está contraindicado en la lactancia, la cafeína traspasa la leche materna la cual puede producir aumento en ritmo cardíaco del bebé; para personas con taquicardia; para personas con problemas cardíacos previos.

Té rooibos: No es un té como tal pero fue denominado así por los ingleses que lo tomaban en Sudáfrica al no encontrar allí el té negro que tomaban en su país. Viene de un arbusto de la familia de las legumbres por lo que no contiene cafeína, así que es ideal para niños y personas con problemas para dormir. En realidad es una infusión. Es una excelente alternativa para el té rojo.

Es bueno para los trastornos digestivos e intestinales; tiene efecto antioxidante y protege al organismo de los radicales libres; fortalece huesos y dientes; es bueno para ciertos problemas de la piel; como es un suave diurético, ayuda a bajar de peso; es remineralizante; equilibra el sistema nervioso; puede ser consumido por los hipertensos por no tener cafeína; elimina bacterias bucales.

Todavía no se conoce si puede afectar la eficacia de algunos medicamentos y faltan estudios para determinar sus contraindicaciones.

Camellia sinensis, árbol de donde se extraen las hojas para crear el té
Imágen tomada de: http://www.camellias-acs.com


Estos definitivamente son los principales y más beneficiosos tipos de té, espero que esta publicación haya ayudado a un mejor conocimiento del tema, recuerda que siempre debes consultar con tu médico antes del consumo de estos y que jamás deben reemplazar la visita a este en la cura de enfermedades, pues es nuestro doctor quién debe guiarnos al respecto según nuestro historial médico. 

Espero que te haya gustado, no olvides dejarme tus comentarios. Besos,


Vivian Gil-Ro.